10 horas de juego después
resulta que me encuentro un Orni un poco más al sureste del puente, como a unos 300m (sí, 10 horas para recorrer 300m... pero no en línea recta) que me habla de un dragón que se quiere comer a una serpiente.
Tras seguir la pista obvia, y recorrer el río... bueno, bordear el río, porque ni de broma me iba a enfrentar a tanto bicho, llego al lugar (lleno de enemigos, cómo no) y tras hacer de bombero en las sombras, practicar puntería, y llevarme algún susto con bichos de nivel medio... me veo al bicho gordo que guarda el obvio tesoro.
Una cosa que me está encantando es que si exploras un poco, encuentras un recoveco en la "boca de la serpiente" en el que puedes liarte a bombazos sin que la IA del bicho sepa cómo hacerte un rasguño
Bien, el caso es que allí había otro altar, hablamos de como a 300m del puente donde encontré al dragón de verdad, pero a ver si lo encuentras
Y si le ofreces la escama, como en el otro caso, te da acceso a un templo que está vacío... salvo por el obvio cofre y la obvia momia que te da el típico orbe del valor.
Iba a seguir mi ruta de camino a otro dragón, cuando me interrumpió el Orni, pero como necesito ampliar el inventario, y el lugar estaba fuera de mi mapa, pues he decidido poner rumbo norte en dirección al castillo, así que pasaré por Hatelia a recoger a mi caballo, pararé en Kakariko a repostar, me pasaré por la posta al norte de la meseta inicial y seguiré las indicaciones (hacia el este del castillo) que me dieron el año pasado, más o menos, cuando llegaba a Kakariko por primera vez ¡una ruta directa!
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