Abro este hilo, con este título tan llamativo, como los
seriales tan entretenidos de principios de los 90; por eso
mismo...
En su momento nos deciamos que algunos de estos acontecimientos,
que nos fué dado presenciar e incluso participar en ellos,
y aún muchos no llegamos a sufrir, afortudamente; tenían
sustancia suficiente para haber llegado a ser un capítulo
de la serie.
Empezaré por la historia de "Jorgito, in nomine pater"
-Debía correr el año 2001 o así,
estábamos ya en bachillerato tecnológico...
En la TV había un anuncio en el que salía un
deportista de color, de nombre "Atobolto" (sé como se pronuncia,
pero no cómo se escribe).
En el anuncio alguien decía... "es Atobolto", y alguien
respondía "no, Atobolto tiene mucho pelo"....
telita ahí, aquí radica la clave: "mucho pelo"... Atobolto = mucho pelo
así como a lo afro y muy alborotado,
El tal Jorgito, tenía un pelo de ese tipo, aún siendo
un muchacho tranquilo de piel blanca;
pero alborotado que crecía en forma de pelota...
Ya desde las ventanas de los edificios, por la calle,
le decían de vez en cuando; "hey, Atobolto"
Una vez iba con él, y además de decirle eso de
"hey, Atobolto" le tiraron desde la ventana
una revista porno Amanda enrollada, con la intención
de darle... resulta que le dieron un regalo, porque
ese número de Amanda estaba muy bien sembrado...
Siguió pasando el tiempo y llegó el culmén...
nos enteramos de que el colega Jorgito no
estaba bautizado... y por la especulación de los sabios
llegamos a la conclusión de que ese pelo a lo afro
y alborotado sólo podía ser consecuencia de una posesión...
a ningún chico blanco le sale el pelo de forma indomesticable.
Determinados, tras consabida deliveración, que no estaba
poseído, sino que estaba siendo tentado y el pelo era
una manifestación de naturaleza oscura.
Así que en prueba manifiesta de nuestra virtud, no se me ocurrió
otra cosa que recomendar un bautizo seguido de un exorcismo.
Se empezó a cocinar la broma, una de las grandes, así con ese
sin sentido.
En paralelo, Ángel, un crack del instituto y gran dolor de cabeza
de los jefes de estudio; fué preparando el patio, para poder
prender una cruz con gasolina... y tan concienzudo fué, que levantaba
el suelo y colocaba algo debajo, para que la gasolina no mermase por la acción
absorbente del suelo, con la intención de que las llamas purificadoras
que nos asistirían en el ritual duranse lo suficiente y el espectáculo
fuese de calidad.
Mientras tanto, aparte de ir documentándonos sobre cómo
es el rito de un bautizo; impartí órdenes de que otros muchachos
se estudiaran algunos rezos en latín. Increíblemente se los aprendieron
de memoria, ese sería el coro protector, que nos banaría con su
bendita música.
Ángel había recogido agua bendita de un par de iglesias y
tenía unos recipientes preparados.
También impartí órdenes de que ese día, todos los que participarían
habrían de venir bien vestidos, con camisa y zapatos elegantes;
hecho que el día de autos fué muy raro, pues mis compañeros no
solían compartir en exceso mis gustos de señor.
Ese día estábamos preparados... cuando Jorgito llegó a clase
tras el patio, Ángel ya tenía lista una colchoneta de las anchas
en el patio; también acababa de echar la gasolina.
Agarramos a Jorgito entre todos, diciéndole que era por el bien
de su alma y todas esas cosas...
Le bajamos por lo menos 20 a la colchoneta, lo bautizamos;
el muchacho flipando... y se encendió la cruz del patio;
el instituto entero flipó... y comenzó la parodia del
exorcista... todos echándole agua bendita a raudales...
jajajaj
el coro cantando en latín, y nosotros
"El poder de Cristo te obliga", "abandona a Jorgito"
"¡No le tientes!"
A los 5 minutos era un chico nuevo,
medio instituto presenciándolo; una vez terminado
nos dimos la vuelta y allí estaba la jefatura el completo,
creyendo que nos habíamos pasado con alguien, cuando
en realidad no le sucedió nada malo. Al contrario,
era un chico nuevo.
A la jefatura les explicamos nuestras elucubraciones,
y que en conocimiento de nuestra virtuosa caballerosidad
habíamos procedido a salvar su alma, que bien podría haberse
condenado por la dejadez de sus padres, que no lo habían bautizado;
y que como llevaba muchos años en el mundo, podía tener alguna
mácula digna de ser expulsada... mejor tener precaución.
-No recibimos castigo alguno, pues fliparon.
Nos lo pasamos muy bien y no nos acarreó ningún problema.
Ángel y su fuego si incurrió en algún problema,
pero a él ya le daba igual a esas alturas.
Si debo decir, que en este trabajado acto,
si tuve mucha participación en calidad de
director de orquesta.
Nunca me gustaron las bromas convencionales,
los asuntos del humor, hay que trabajárselos. xD
Editado: No era un instituto de la iglesia,
ni concertado, era y sigue siendo un instituto
público.
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