Linux y el cemento
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- 12/01/2008 a las 10:06 (3763 Visitas)
Este post va en respuesta es este otro post:
http://www.gp32spain.com/foros/blog.php?b=1000
Se titula, "el cemento me odia":
Yo tengo una casa de papel y estoy muy agusto en ella; la he dividido a mi gusto, me he preocupado de asegurarla, cubrirla de una capa impermeable, instalarle una alarma y tengo contratado a un guardia de seguridad.
Mi casa de papel es muy grande y todo está muy a mano; tiene unos muebles la mar de bonitos y es muy confortable.
Un día decidí mudarme a una casa de cemento; me decían que era mucho mejor que la mía; que era una maravilla y además era gratis. Asi que al final me dio por probar el cambio.
Cuando llegué a la casa de cemento lo primero que me llamó la atención fue que todas las habitaciones estaban cerradas y que todas tenían cerradura; me puse a explorar las habitaciones y me di cuenta de que mi llave no abría todas las puertas; asi que volví a la inmobiliaria para que me diesen la llave maestra; pero me dijeron que no la usase mucho, porque si la perdía era bajo mi responsabilidad (solo les faltó llamarme tonto).
Una vez explorada la casa me encontre con algunos muebles y electrodomésticos de gran calidad, otros comprados en las rebajas de ikea y muchos otros ni siquiera estaban; asi que decidí ir a buscar nuevos muebles. Cuando llegó el camion de la tienda comprobé horrorizado que el intrincado diseño de los pasillos no me dejaba poner los muebles donde yo quería asi que acabé poniendo camas en el recibidor, armarios roperos en los baños y otras lindezas por el estilo. Lo peor fue cuando tuve que devolver bastantes cosas a la tienda porque simplemente no había manera humana de hacerlas entrar donde deberían estar.
Estaba un poco deprimido tumbado en un sofa que había quedado atascado entre la cocina y el aseo; cuando empezó a sonar el teléfono. Ante la llamada salí raudo y veloz en busca del origen de la misma. Empecé a buscar por un sitio y por otro, me encontre alguna puerta cerrada y tuve que hacer uso de la llave maestra (joer con estas puertas, se cierran solas) y despues de 15 minutos dando vueltas por fin encontré el dichoso teléfono (por suelte el que me llamaba tenía muuuucha paciencia); pero cuando voy a descolgar observo que el teléfono tiene 6 auriculares distintos (dichosa ingeniería alemana) tras descolgar 3 o 4 por fin escuché la voz del que me llamaba; era un viejo amigo que se había mudado a una casa de cemento tiempo atrás y al que aproveché para contarle mis penas, y decirle que hechaba de menos todas las cosas de mi casa de papel; entonces el respondió:
-¡pero si no hay problema!, puedes meter casi todo lo que tenías en tu casa de papel en la bodega.
-¿en serio?¿incluso mis electrodomésticos?
-Si, por supuesto, la instalación eléctrica de la bodega es muy similar a la que hay en las casas de papel.
Entonces ni corto ni perezoso arramblé con todo lo que tenía en la vieja casa y me puse a probar su funcionamiento en la bodega. La cafetera funcionaba bien, pero tardaba mas tiempo en hacer el café; la supernintendo funcionaba, pero por desgracia los mandos no respondían; el equipo de música se encendía pero no hacía ninguna clase de sonido; en fin, todo iba a medias (al menos la lámpara funcionaba bien). Al día siguiente me puse a ordenar mi colección de libros, discos y películas; eso no sería un problema pensaba yo; ya que ésta casa de cemento es igual de grande que mi vieja casa de papel. Empecé a colocar mis cosas en los estantes y vi que me faltaba sitio, asi que me dirigí a otra habitación en la que se suponía tendría que haber estanterías vacías. ¿Sabeis que me encontré? pues todas las tuberías y cables de la casa, por ahí pasaba el agua potable, el saneamiento, el sistema de calefacción y hasta la luz y el teléfono. Estaba claro que todos esos sistemas no ocupaban ni el 20% de la habitación pero estaban agolpados al lado de la puerta impidiendo es acceso al espacio libre de la misma; tras ver eso, fui a quejarme a la inmobiliaria y me dijeron que lo sentían pero que la casa estaba construida así y que no podría hacer uso de esa habitación.
Volví muy enfadado a mi casa de cemento y cuando voy a abrir la puerta me doy cuenta de que me he olvidado de la llave maestra en algún lugar; como no estaba dispuesto a dormir fuera, al final pude entrar con otra llave pero no pude acceder a todas las estancias.
Al día siguiente decidí volver a mi casa de papel; pero claro, parte de mis cosas se habían quedado en habitaciones a las que no tenía acceso por haber perdido la llave; fui a la inmobiliaria por última vez por si tenían otra copia de la llave maestra y me dijeron que no. Que por haber perdido la llave habría que demoler por completo la casa para acceder a su interior y que seguramente las cosas se destruirían en la demolición. Asi que compungido y con la sensación de haber sido timado (no en dinero, pero si en tiempo) volví a mi casa de papel, que estaba triste y cuasi vacía...
En ese mismo instante recordé que tenía la casa asegurada; y tras un par de llamadas conseguí que mi casa luciese como antaño en unos minutos.
Y desde entonces me dedico a advertir a todo el mundo de la perversidad innata de los objetos inanimados (en especial si están hechos de cemento).
Bueno, de momento es una beta del texto; corregiré las faltas y algun que otro errorcillo cuando tenga tiempo.