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Ver la versión completa : El guerrero de la pluma



josepzin
08/01/2014, 13:22
Todos sabemos que podemos luchar con la pluma o con la espada, uno significa las armas, violencia, muerte, el otro en cambio es la lucha pacífica desde las palabras.

Casualmente ayer descubrí un guerrero de la pluma en un blog, un valiente joven que combate contra la malvada opresión colonialista de España sobre América.

Nada mejor que leer sus palabras de guerra:


me encanta escribir mal (tranquilamente podria usar el corrector de google pero no ) lo ago a propósito por que siempre ay un boludo “esclavito burges de las reglas ” que se enoja y me encanta hacer enojar a la gente jaaaaa siento libertad cuando pongo una b larga en el lugar donde va una corta me encanta romper las reglas y mas si an sido impuestas por los españoles conquistadores de mierda que odio con toda mi alma ….e dicho

-----Actualizado-----

Esa frase da para tanto, haya tanta ignorancia, incongruencia y contradicción en esas pocas palabras que me da pereza empezar :D :D

swapd0
08/01/2014, 13:24
Ja, me hace gracia que escriba como quiera para romper las reglas de los conquistadores españoles pero sigue escribiendo en español...

Ryo-99
08/01/2014, 13:38
España ha sido invadida por Celtas, Fenicios, Cartagineses, Griegos, Romanos, Bizantinos, Suevos, Vándalos, Alanos, Visigodos, Arabes, Bereberes, Godos, Vascones , McDonalds, Franceses, Ingleses y no nos quejamos tanto.

josepzin
08/01/2014, 13:46
Igual es una astuta manera de ocultar su ignorancia haciendose pasar por un rebelde!! :D

princemegahit
08/01/2014, 13:47
Eso se llama **********. Guerreros de la pluma eran Lorca, Machado, Juan Ramón Jimenez, Valle-Inclan...

swapd0
08/01/2014, 13:53
España ha sido invadida por Celtas, Fenicios, Cartagineses, Griegos, Romanos, Bizantinos, Suevos, Vándalos, Alanos, Visigodos, Arabes, Bereberes, Godos, Vascones , McDonalds, Franceses, Ingleses y no nos quejamos tanto.
Muchos de esos pueblos estuvieron en la península andes de que existiera España, por eso me hace gracia los nacionalismos.

platipus
08/01/2014, 14:52
Disculpad el oftopic pero el título del post me ha recordado a Herbert.

http://www.familietroch.be/stripspeciaalzaak/Stripspeciaalzaak/www.stripspeciaalzaak.be/beelden/Zaak39-StripFacts/Herbert.jpg

selecter25
08/01/2014, 17:39
me encanta escribir mal (tranquilamente podria usar el corrector de google pero no ) lo ago a propósito por que siempre ay un boludo “esclavito burges de las reglas ” que se enoja y me encanta hacer enojar a la gente jaaaaa siento libertad cuando pongo una b larga en el lugar donde va una corta me encanta romper las reglas y mas si an sido impuestas por los españoles conquistadores de mierda que odio con toda mi alma ….e dicho

Esto traducido viene a ser:

Soy un hoygan espabilado que no sabe escribir y quiero que los hoygan apollardados crean que soy un genio.

BonesCollector
11/01/2014, 00:45
Botella al mar para el dios de las palabras
[Discurso ante el I Congreso Internacional de la Lengua Española -Texto completo.]

Gabriel García Márquez
A mis 12 años de edad estuve a punto de ser atropellado por una bicicleta. Un señor cura que pasaba me salvó con un grito: «¡Cuidado!»

El ciclista cayó a tierra. El señor cura, sin detenerse, me dijo: «¿Ya vio lo que es el poder de la palabra?» Ese día lo supe. Ahora sabemos, además, que los mayas lo sabían desde los tiempos de Cristo, y con tanto rigor que tenían un dios especial para las palabras.

Nunca como hoy ha sido tan grande ese poder. La humanidad entrará en el tercer milenio bajo el imperio de las palabras. No es cierto que la imagen esté desplazándolas ni que pueda extinguirlas. Al contrario, está potenciándolas: nunca hubo en el mundo tantas palabras con tanto alcance, autoridad y albedrío como en la inmensa Babel de la vida actual. Palabras inventadas, maltratadas o sacralizadas por la prensa, por los libros desechables, por los carteles de publicidad; habladas y cantadas por la radio, la televisión, el cine, el teléfono, los altavoces públicos; gritadas a brocha gorda en las paredes de la calle o susurradas al oído en las penumbras del amor. No: el gran derrotado es el silencio. Las cosas tienen ahora tantos nombres en tantas lenguas que ya no es fácil saber cómo se llaman en ninguna. Los idiomas se dispersan sueltos de madrina, se mezclan y confunden, disparados hacia el destino ineluctable de un lenguaje global.

La lengua española tiene que prepararse para un oficio grande en ese porvenir sin fronteras. Es un derecho histórico. No por su prepotencia económica, como otras lenguas hasta hoy, sino por su vitalidad, su dinámica creativa, su vasta experiencia cultural, su rapidez y su fuerza de expansión, en un ámbito propio de 19 millones de kilómetros cuadrados y 400 millones de hablantes al terminar este siglo. Con razón un maestro de letras hispánicas en Estados Unidos ha dicho que sus horas de clase se le van en servir de intérprete entre latinoamericanos de distintos países. Llama la atención que el verbo pasar tenga 54 significados, mientras en la República de Ecuador tienen 105 nombres para el órgano sexual masculino, y en cambio la palabra condoliente, que se explica por sí sola, y que tanta falta nos hace, aún no se ha inventado. A un joven periodista francés lo deslumbran los hallazgos poéticos que encuentra a cada paso en nuestra vida doméstica. Que un niño desvelado por el balido intermitente y triste de un cordero dijo: «Parece un faro». Que una vivandera de la Guajira colombiana rechazó un cocimiento de toronjil porque le supo a Viernes Santo. Que don Sebastián de Covarrubias, en su diccionario memorable, nos dejó escrito de su puño y letra que el amarillo es «la color» de los enamorados. ¿Cuántas veces no hemos probado nosotros mismos un café que sabe a ventana, un pan que sabe a rincón, una cerveza que sabe a beso?

Son pruebas al canto de la inteligencia de una lengua que desde hace tiempo no cabe en su pellejo. Pero nuestra contribución no debería ser la de meterla en cintura, sino al contrario, liberarla de sus fierros normativos para que entre en el siglo venturo como Pedro por su casa. En ese sentido me atrevería a sugerir ante esta sabia audiencia que simplifiquemos la gramática antes de que la gramática termine por simplificarnos a nosotros. Humanicemos sus leyes, aprendamos de las lenguas indígenas a las que tanto debemos lo mucho que tienen todavía para enseñarnos y enriquecernos, asimilemos pronto y bien los neologismos técnicos y científicos antes de que se nos infiltren sin digerir, negociemos de buen corazón con los gerundios bárbaros, los qués endémicos, el dequeísmo parasitario, y devuélvamos al subjuntivo presente el esplendor de sus esdrújulas: váyamos en vez de vayamos, cántemos en vez de cantemos, o el armonioso muéramos en vez del siniestro muramos. Jubilemos la ortografía, terror del ser humano desde la cuna: enterremos las haches rupestres, firmemos un tratado de límites entre la ge y jota, y pongamos más uso de razón en los acentos escritos, que al fin y al cabo nadie ha de leer lagrima donde diga lágrima ni confundirá revólver con revolver. ¿Y qué de nuestra be de burro y nuestra ve de vaca, que los abuelos españoles nos trajeron como si fueran dos y siempre sobra una?

Son preguntas al azar, por supuesto, como botellas arrojadas a la mar con la esperanza de que le lleguen al dios de las palabras. A no ser que por estas osadías y desatinos, tanto él como todos nosotros terminemos por lamentar, con razón y derecho, que no me hubiera atropellado a tiempo aquella bicicleta providencial de mis 12 años.

Lo mismo, pero por un verdadero guerrero de la pluma...

josepzin
11/01/2014, 00:56
El otro más que Guerrero de las palabras es Terrorista de las idem :-D

blindrulo
11/01/2014, 01:04
Lo mismo, pero por un verdadero guerrero de la pluma...

Muy bonito pero estoy en contra de lo que dice, que además es una contradicción. primero habla de la riqueza de la Lengua y luego de simplificar la ortografía (él dice gramática, primer error) y simplificar la ortografía es empobrecer la lengua.

Un saludo. :brindis: